Una de las tendencias de diseño de interiores y de decoración sigue la filosofía del Feng Shui, que prioriza las energías que fluyen entre los espacios, los objetos y las personas. La importancia de la disposición de estos factores en el hogar es importante para tener una protección general.
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La cocina es uno de los espacios del hogar en donde hay que prestar más atención a la disposición de los objetos y, sobre todo, a los utensilios o artefactos que se usan para preparar, conservar o transformar los alimentos. El fuego y el agua son dos elementos muy presentes en esa habitación y tienen que estar armonizados para que no estén en “tensión”, según el Feng Shui.
Para generar prosperidad, abundancia y bienestar, es necesario que el artefacto que se utilice para cocinar y el fregadero estén en sitios adecuados para lograr un equilibrio entre los elementos agua y fuego. Es importante destacar que la zona de preparación de los alimentos tiene que estar estar orientada hacia la entrada de la cocina.
Pero lo más importante, según el Feng Shui, es que el artefacto o zona de cocción no esté en el mismo espacio inmediato que el fregadero de la cocina. Sus energías son totalmente opuestas, por eso para equilibrarlas deben estar separados. Para lograr el objetivo se pueden colocar entre medio utensilios u objetos de madera o metal.
Además de estar separado de la zona de cocción, el fregadero debe mantenerse limpio porque puede atraer la energía del desorden a los miembros del hogar. Este sitio también debe estar agrupado con artefactos u objetos del mismo elemento, es decir, el agua: lavavajillas o lavadora.