A más de uno le debe haber sucedido que el bizcocho no le haya quedado de la forma que esperaba. Pero en muchos casos sucede que partimos de un mal bizcochuelo como base y de esa manera es casi imposible lograr algo muy bueno. En el mundo de la repostería hay que ser muy cuidadoso al momento de elaborar las recetas porque hasta un pequeño error puede arruinar todo el proceso. Y ese es uno de los casos cuando sacamos el bizcocho del horno y este tiene grietas, y no sabemos cómo solucionarlo. Pero eso llegó a su fin porque aquí te traemos la solución.
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¿Por qué el bizcocho se rompe?
Preparas los ingredientes, bates la masa, la viertes en su molde y la llevas al horno. Posteriormente, comienza a dorarse, lo dejas un poco más, por dentro el bizcocho aún está crudo, esperas y luego notas que por ese lado está subiendo más y se masca la tragedia: se está quemando por arriba.
A continuación piensas en cortarle la parte de arriba para arreglarlo. Dejas que termine de hornearse y lo sacas. Lo dejas enfriar y a la hora de desmoldar, el primer susto: el bizcocho se rompe. Y tú, valiente y apañada que eres, crees que con un poco de crema podrás pegarlo de nuevo y nadie lo notará. Así que sigues adelante: coges tu cuchillo de sierra, respiras hondo para controlar las ganas de meter el bizcocho en la basura, y te dispones a arreglarlo, pero no te encuentras con un buen resultado al final de todo.
¿Cómo lograr que no se rompa?
En ocasiones, podemos sacar un bizcocho del horno y encontrar que se ha abierto o que tiene grietas enormes en la superficie. Esto puede suceder porque la temperatura del horno es muy alta. Si hemos horneado a mayor temperatura de la debida, es posible que la levadura haya subido muy rápido sin dar tiempo a formar la miga, por eso ha provocado roturas. Recuerda controlar la temperatura de tu horno con un termómetro externo para evitarlo. Como más despacio se hornee el bizcocho, menos opción le damos a romperse en grietas.
Otra opción puede ser que nos hemos excedido con el tiempo de horneado: Si el bizcocho está en el horno más tiempo del debido, también puede resquebrajarse y hacer grietas. Asegúrate de sacarlo en el momento que esté listo, ni antes, ni después. Y con tal de tener cuidado en estos dos puntos, lograrás un delicioso bizcocho para decorar y poder disfrutar.