La mayoría de los helados que venden en las tiendas o supermercados contienen ingredientes que en consumo excesivo pueden ser perjudiciales para la salud. Para disfrutar postres más saludables en casa e incorporar proteínas a nuestra dieta, existen recetas que tienen de protagonistas a las frutas y los lácteos desnatados. A estas preparaciones también se le pueden incorporar frutos secos y semillas.
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Una de las opciones ideales es el helado de melocotón y queso fresco batido desnatado. Para hacer este postre ideal para la ola de calor, necesitas 500 gramos de la fruta deshuesada (mientras más madura mejor) y 350 gramos del lácteo. La receta rinde para ocho porciones y además tienes que conseguir: 30 ml de zumo de limón; 130 g de azúcar; 130 ml de agua; una cucharadita de maicena (opcional para espesar) y esencia de vainilla.
Lo primero que debes hacer para preparar este postre saludable es lavar y trocear los melocotones. Si lo prefieres con más textura, puedes dejar la piel. Luego debes colocarlos en un bol y agregar el zumo de limón y un chorrito de esencia de vainilla. El paso siguiente es hacer un almíbar con el agua y el azúcar, esperar que se enfríe e incorporar a las frutas. Lo debes dejar reposar por unos 30 minutos y luego tienes que triturar todos los ingredientes. La textura debe quedar cremosa, para luego añadirle el queso y la maicena. Al mezclar los alimento, puedes ir probando si está bien de dulzor o si es necesario añadir el azúcar.
Si eres amante de las fresas puedes hacer dos helados saludables, con distintas texturas e ingredientes. Para la primera opción necesitas lavar, secar y trocear 500 gramos de esta fruta y colocarla en un bol con 150 gramos de azúcar. Luego de remover para integrar, debes añadir 350 gramos de yogur griego y esencia de vainilla. Finalmente, debes triturar todo en la batidora y llevar al frío.
Si, en cambio, quieres una textura más cremosa del helado de fresas, puedes congelar 400 gramos de esta fruta picada y una banana, un día antes de utilizarlas, luego las colocarás en la batidora junto a medio vaso de leche desnatada (puede ser de origen vegetal también); dos tazas de queso fresco batido desnatado y el zumo de medio limón. Al triturar y mezclar todos los ingredientes, tendrás un postre alucinante.