Esta tarta de piña es una receta ideal si quieres un postre fresco y dulce, es una buena combinación y además estás añadiendo frutas a tus comidas, algo que es verdaderamente importante. Si quieres ser la envidia de tu vecindario, aprende cómo hacer esta receta sencilla de tarta de piña sin horno y verás como te van a salir planes todos los días.
Ingredientes para la tarta de piña sin horno
- Varios bizcochos de soletilla.
- Dos latas de piña en su jugo.
- Un litro de nata líquida para montar.
- Dos sobres de gelatina de piña.
La idea es hacerlos de forma individual, para que las raciones no sean abusivas, de este modo, estamos consintiéndonos con algo dulce, y a la vez estamos cuidando la línea, pero para eso haría falta horno, así que vamos a hacer la receta en versión golosa, ¡verás cómo te gusta!
¿Cómo se hace la tarta de piña sin horno?
Primeramente, debemos preparar los bizcochos de soletilla para que sean la base de la tarta. Sacamos y secamos la piña fuera de su jugo, y mojamos los bizcochos en el jugo de la piña, de este modo creamos la base de la tarta de piña. A continuación, preparamos el relleno de la tarta, para ello, apartamos unas cuantas rodajas de la piña, y el resto las trituramos para la confitada.
En una olla, ponemos hervir el jugo de la piña restante que habíamos usado para mojar los bizcochitos. Por otro lado, comenzamos a montar la nata, y cuando el jugo esté hirviendo, echamos la mezcla de gelatina. Cuando esto acabe, dejamos templar el contenido de la olla.
Cuando haya pasado ese tiempo, mezclamos la piña triturada, la nata montada y la gelatina con el jugo de piña, y dejamos esta mezcla de la tarta en frigorífico al menos un día, ten en cuenta que deberías preparar un día antes este postre para poder comerlo.
Una vez hayamos juntado la mezcla con la base, simplemente deberos decorar la tarta con las rodajas de piña que habíamos apartado y tendríamos una tarta de piña fría, estupenda.
Y con esto y unos bizcochos, tenemos tarta de piña con un aspecto delicioso.